#UrbanCityNightMusic es el nombre de la etiqueta con el que encasillo este tipo de música, The Blue Nile grabó en 1989 su obra maestra, un disco ninguneado en su época y considerado ahora una de las grandes obras maestras de la década de los 80s.
La primera vez que me enfrenté a este disco fue por recomendación de un amigo AORero y conociendo mis gustos, auguró sin ningún tipo de duda que me iba a encantar este disco, ya que éste es uno de los discos favoritos de Hogarth (cantante de Marillion, una de mis debilidades y de Miguel Bosé, cantante al que tengo un profundo respeto a pesar de su trayectoria "irregular", lo dejaré estar ahí...).
El mismo color de la portada ya nos transmite ciertas emociones: un azul oscuro similar al de un cielo anocheciendo que evoca cierta sensación de calma.
Son tan sólo 38:26 min de duración, la primera vez lo escuché de tirón. Durante la escucha tuve una sensación de homogeneidad absoluta, como si se tratase de una pieza musical compuesta por un corte. Ninguno destacaba sobre el otro. Se me abrió otro mundo dentro de todo lo que había escuchado hasta ahora... el "dream-pop", "soft-pop"... Música de una elegancia, sutileza, y exquisitez tales que me parecía algo inigualable, cualquier adjetivo con el que intente expresar la pulcritud de la obra se quedará corto.
Over the Hillside, arranca cual paseo nocturno, a ritmo muy pausado y cierto carácter intimista. A esta apertura le sucede Downtown Lights, quizá el tema más conocido del álbum, alcanzó el puesto número 10 en la conocida Billboard Hot Tracks a principios de 1990. La "serenata de paseo nocturno por la ciudad" se va sucediendo con total naturalidad, una canción tras otra sin romper ninguna el ritmo ni la coherencia. La siguiente es Let´s Go Out Tonight, resulta una delicia a los oídos, crea una atmósfera de una belleza singular, es como una burbuja de intimidad entre la música y el oyente. Todos y cada uno de los pasajes musicales transmite paz y serenidad, la música discurre a través del oyente a la par que fluyen diversos parajes nocturnos en nuestra mente, ciudades desconocidas pero acogedoras, con sus calles iluminadas por una tenue y amarillenta luz... aceras con charcos, producto de una lluvia reciente... incluso se puede percibir la quietud de la noche y la humedad del ambiente. En resumen, nos está contagiando la magia de la ciudad nocturna y digo magia porque a pesar de la cadencia del sonido y la melancolía... no deja de transmitir un sentimiento de optimismo y romanticismo por la urbe nocturna, un ejemplo claro lo tenemos al escuchar Headlights on the Parade tiene un sonido más luminoso que las anteriores. From a Late Night Train, retorna al sonido de la soledad que dejan las estaciones vacías y a las... Seven A.M. nos deleita con algo más electro-pop (por decirlo de alguna manera), es uno de los temas que más dista del sonido global del álbum, aunque para nada desentona con el resto. Hay algo que me gustaría destacar y es el groove de bajo junto a ese rasgueo final de guitarra que le da un sonido funky... además del contraste con los teclado y sonidos excesivamente artificiales de fondo (pero muy acertados). Todo este conjunto de elementos hacen de esta canción la más interesante para mi gusto. Con Saturday Night, llegamos al colofón de la serenidad musical... la guinda del pastel, un disco de diez, un disco redondo (nunca mejor dicho), un disco para escuchar de principio a fin como si de un tema se tratase... y como bien he leído en alguna crítica sobre el disco, he decidido condensar la esencia del disco en una frase:
Hats, es el disco nocturno por excelencia. La noche en vela más hermosa que podamos escuchar.
Hats, es el disco nocturno por excelencia. La noche en vela más hermosa que podamos escuchar.